El popular “Pin“, tenía a la pequeña comunidad de El Chaparral en la expectativa. Los vecinos de este sector pensaban, que la sequía y el calor que golpeaba muy duro el día a día de los Chaparraleros, habían hecho florecer un clon en esta comunidad del niño de Juan Peña de Pedro Emilio Coll.
Pin a diferencia de Juan Peña no tenía 12 años. Pin era un adulto casi mayor . Desde hacía unos días; Pin, gastaba muchas horas del día en completo estado de quietud, tocándose con su dedo el trago. En esa pose de pensador o distraído, se tocaba con su dedo índice derecho, el trago derecho.
Antes de ponerse por horas en este estado de trance; Pin había salido a cazar iguana y con una rama de cují se maltrató su trago. Desde ese momento, Pin se pasaba largos ratos tocándose el trago derecho con su índice derecho. Bacho, Cruz Enrique, Gruber y otros vecinos, se creían que la sequía y el sol, le estaban dando al Chaparral un gran filósofo, que dejaría de empinar el codo. Así lo sentían, cuando lo veían por largos ratos (como pensativo) tocándose su trago derecho.
Texto: Evaristo Marcano Marín
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