Cuando entramos por la avenida Juan Bautista Arismendi, nos recibe una figura, mitad mujer y mitad pez, donada por unos franceses. Primero estuvo en la Plaza San Nicolás, hoy Plaza Bolívar, más tarde en el Paseo La Marina, y por último en la entrada de la ciudad, donde luce abandonada.
El 1 de enero de 1905, es inaugurado el monumento a LA SIRENA en la Plaza San Nicolás, hoy Plaza Bolivar de Porlamar. Más tarde, durante la dictadura perejimenista, es trasladada al extremo oeste del Paseo La Marina, donde permanece por muchos años hasta que por motivo de la construcción de Muelle Crucero “Puerto de la Mar”, es colocada en 1994, por Decreto Municipal, a la entrada de la ciudad, lo que significó la destrucción de su fuente perdiendo su encanto y majestuosidad.
Se trata de una pieza esculpida en bronce que representa la figura mitad mujer y mitad pez, con pose de niña sentada para el juego, de cabellera ondulada, recogida en largo hacia la nuca, de la cola de pez aleteando a sus espaldas. La figura está representada con el rostro de perfil, hacia arriba, sosteniendo entre sus brazos flexionados el símbolo de frondosidad y la cornucopia hacia arriba.
Mide aproximadamente dos metros de altura. Fue donada a la ciudad por los Hermanos Rosenthal, comerciantes franceses establecidos, entonces en Margarita. Es una reproducción de otra existente en el Jardín de las Tullería, que formaba parte del desaparecido Palacio de Las Tullerías en Paris.
En la imagen, del archivo de Efraín Subero, se muestra un fragmento de La Sirena, cuando en todo su esplendor, estaba colocada en lo que fue el antiguo Paseo La Marina.
Recopilación: Alexis Marín Cheng y su Parque Museo Pueblos de Margarita- Enero 2024.
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