San Lorenzo (c 225/258) fue el más importante de los siete diácono regionarios de la ciudad de Roma. Bajo su tutela y responsabilidad, estuvo el patrimonio de la iglesia y fue perseguido y martirizado por ese hecho.
El Sr. Pablo Marcial, desde la calle y bajo el “palo” de aguacero llamó a la Sra Eloisa y le pidió que averiguara el santoral de ese día. Así, El Maci comenzó a sentir a su santo patrono.
De su nacimiento, hay dos referencias: Huesca y Valencia en España, pero se tienen a Huesca como su lugar de nacimiento.
Décimas
Cristiano como ninguno,
un Diácono Regionario
un sentido visionario
de siete claves, él fue uno.
Su valor muy oportuno
frente a la fría cizaña,
pudo aguantar la patraña
de aquel emperador cruel;
hombre cabal y muy fiel
nacido en Huesca de España
Valeriano poderoso
su fe quiso doblegar,
pretendió hacerle entregar
lo que él guardaba celoso.
Patrimonio religioso
que Lorenzo no entregó
y con valor el guardó,
soportando su suplicio
hizo su gran sacrificio
martirizado murió.
Año quince fue el momento;
agosto con gran sequía
por El Maco no llovía,
largo y grande el sufrimiento.
Todo el pueblo era un lamento
pero ese diez se nubló;
El cielo se encapotó,
la perdiz con su cantar
produjo un duro tronar;
cuando el Diácono llegó
Día lindo y memorable
El Maco sintió al patrono,
porque Dios allá su trono
percibió lo lamentable.
De sequía insoportable,
muy rápido hizo llegar
gran aguacero al lugar
que reventó las quebradas
y en todas las conucadas
el maíz volvió a “borlear”.
Texto y Décimas: Evaristo Marcano Marín
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