El estilo de vida de los padres, el tipo de ocupación que desempeñan, los valores, actitudes y prácticas que mamá o papá realizan a diario influyen en el proceso del desarrollo vocacional de sus hijos. De allí estriba la necesidad de aprovechar este tiempo de cuarentena para observar y estimular el potencial de habilidades que tienen nuestros hijos invitándolos a dialogar y realizar ciertas actividades relacionadas con nuestras ocupaciones propias o aquellas a las cuales se dedican algunos vecinos y así de manera espontánea sin presiones ayudarlos a reconocer y desarrollar su vocación.
Sin lugar a dudas, los padres tienen el derecho de sugerir a sus hijos posibles alternativas de estudios pero es fundamental dejar un espacio para que los muchachos tomen sus propias decisiones. El papel asertivo de los padres, les sugerimos a ustedes, es en primer lugar: Dialogar con cada uno, individualmente abordar a sus hijos, acerca de las ventajas, condiciones e inconvenientes que se deben tomar en cuenta para determinadas profesiones hacia las cuales ellos sienten interés o curiosidad.
Por motivación externa, es decir por la influencia de los medios de comunicación social, los amigos, los familiares, el lugar donde estudia, la calle, el mercado laboral, la calidad de la enseñanza que recibe hacen que los adolescentes se inclinen por determinadas profesiones. Por ejemplo ser médico forense no es tan sencillo como aparece en las series de televisión o películas. Y es oportuno esclarecer aspectos en torno a cualquier tipo de ocupación evitando la crítica negativa, prejuicios, burla o ironía. En segundo lugar, aprovechar de ilustrar por analogía como las asignaturas del bachillerato son un ejemplo de las distintas profesiones que asumen las personas para disfrutar de sus habilidades e intereses y por ende obtener ingresos de una forma socialmente aceptable. A manera de ejemplo: debemos relacionar los temas de la asignatura estudios de la naturaleza con profesiones como Bioanalistas, enfermeros, químicos. Los temas de matemáticas tales como logaritmos, plano real, números Z se relacionan con profesiones como ingeniería en Informática. El cálculo de áreas y elaborar un croquis de la casa o diferentes modelos de maquetas, el trabajo con Escalímetro en dibujo técnico tiene vinculación con la ingeniería civil y arquitectura.
Desde los 7 años hasta aproximadamente los 19 años se va formando la vocación incluso hasta los 25 años para que logre consolidarse. Cabe destacar que la madurez y el percatarse por sí mismo un adolescente de cuál es el propósito de su vida, demora y la manera como emanciparse y lograr autonomía que le permita insertarse al campo laboral en una actividad que además de llenar sus expectativas e intereses logre ser su motivación interna, que está conformada por elementos como la personalidad, creencias, valores y el proceso de toma de decisiones, deben concretarse en una decisión personal satisfactoria para dedicase a esa actividad durante gran parte de su vida.
Tipos de vocación según el psicólogo John Holland
Realista: son personas que se enfrentan al ambiente de manera objetiva y concreta, les agrada el uso de máquinas y herramientas. Por ejemplo Agricultura, carpintería, albañilería, jardinería.
Investigadora: Aplican su inteligencia para resolver situaciones o problemas. Dominan ideas, lenguajes, símbolos, les agrada la teoría y evaden actividades prácticas como deportes, gimnasios y comercio. Algunas profesiones de su interés son químico, físico, biólogo.
Artística: Emplean los sentimientos, la intuición y la imaginación para todas sus creaciones. Rechazan las actividades económicas y realistas. Algunas inclinaciones vocacionales son: músico, dibujante, pintor, decorador, diseñador, escritor, novelista.
Social: desarrollan sus habilidades y destrezas comunicacionales y la comprensión hacia los demás. Demuestran sus deseos de prestar ayuda. Poseen habilidades sociales y necesitan interactuar con otras personas. Les gusta asumir la posición de líder. Ejemplos: trabajador social, psicólogo, enfermero, medico, maestro, misionero.
Emprendedora: Demuestran personalidad audaz y dominante, enérgica e impulsiva. Son poco interesados en lo intelectual y lo estético. Prefieren las situaciones arriesgadas como la política, la economía, el liderazgo. Ejemplos: vendedor, industrial, político, inventor.
Convencional: su personalidad los lleva a elegir objetivos y actividades socialmente aprobadas. Prefieren actividades pasivas, ordenadas y muy organizadas como las tareas administrativas, de oficina y asuntos de índole económica. Por ejemplo: contador público, cajero, administrador, bibliotecario.
El rol de los padres consiste en enseñar y alentar a sus hijos a ser observadores de su entorno, observar como otras personas desempeñan sus trabajos y de manera sosegada sin exigencias o mal humar involucrarlos en tareas del hogar: hacer mantenimiento básico del automóvil, aprender a reparar electrodomésticos, hacer reemplazo de piezas o repuestos… ¡Des mistificar las ocupaciones! Tanto niñas como varones pueden aprender a realizar distintas tareas y hasta deportes!
Fuente: Sebastian R. Araceli (2013) Orientación profesional, un proceso a lo largo de la vida. Madrid: Dykinson
Holland,J. (1978) La elección vocacional. Teoría de las carreras. Mexico:Trillas.
Recopilación: Prof. Marthelena Martínez
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