y lo merecía; ayudaba a muchos estudiante; fue quien trajo la gasolina a Margarita en gabarras que fondeaban por el sector Punda en LoCocos; allí estuvieron los famosos “tanques” donde depositaban el combustible para luego repartirlo.
Hizo su buen dinero, lo que le permitió viajar mucho y codearse con gente importante. Inolvidables fueron los carnavales de Margarita en la década de los 60 y 70, cuando traía Steel-Bands desde Trinidad para darle colorido y prestancia. Logró mucha fama también por las anécdotas que protagonizó-incluso las narraba él mismo- por ser un hombre con gran vuelo mental y una condición de margariteño que le permitía esa particular consideración.
En una ocasión su gran amigo Luis “Licho” Fermín lo invitó a una exposición en un museo de Porlamar a la que asistirían muchas mujeres de otras partes del país.
_ “Bartolo, vamos a una exposición de pintura; vendrán muchas mujeres que no son de aquí; seguro que conseguimos un “chance”-así se decía cuando se lograba salir con una mujer que no fuera la legal– le dice Licho Fermín.
_ Este que Licho. Yo no sé lo que es eso, pero bueno, tú me dices lo que hay que hacer-expresó Bartolo Rojas.
Llegan al evento; abren la exposición; pinturas y cuadros por todas partes, incluso presencia de algunos autores; la gente opinando; Licho Fermín hablaba y Bartolo a su lado, asentía ante cada opinión de su amigo.”Ese Licho si sabe de esa vaina” comentaba Bartolo por lo bajito con quien conocía; eso sí, sin quitarle la vista de encima a las elegantes damas que se encontraban en la exposición tal y como Licho Fermín le había dicho. Al mismo tiempo brindaban con buen escocés; ya pasado un buen rato y con los tragos haciendo su efecto, se había formado un grupo entre las mujeres que querían conocer al famoso Bartolo Rojas; Licho se le acerca y, después de presentarlo formalmente, le pregunta:
_ ¿Qué te parece la exposición Bartolo? Y responde Bartolo con su manera particular de hablar:
_ Este que Licho; ¡¿Qué exposición ni exposición es ésta!? ¡Tomando güisqui, comiendo y paseando por este salón! Exposición es venir de Coche pa’ Porlamar a las cinco e’ la tarde, con un motor fallando, un vergajazo de agua y una puntá e’muela! ¡Eso sí es una exposición! ¿No es así señorita? ¡Nojoda Licho! ¡Qué bolas tienes tú!
…”achica achica que achica el bote”
Peroco y Germán.
Tomado del libro: “Ocurrencias de mi gente” de Carlos Mujica “Marunga“
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