Cabalgando con la Décima: La Hallaca
A Lucila, esta mujer menudita y fuerte, que todas las tardes pasaba por el pueblo vendiendo sus pasteles. Hasta no hace mucho; cincuenta años atrás, esto que se nos vendió como hallaca y cuyo sabor disfrutamos casi a diario, era para nosotros pasteles. Era frecuente, que algunas mujeres en nuestrosLeer más