En Margarita hubo una época en que sólo se hablaba de los partidos Unión Republicana Democrática (URD) y Acción Democrática (AD), con sus líderes Jóvito Villalba y Rómulo Betancourt al frente. Tanto era el fanatismo que cuando una persona compraba maíz para su consumo y encontraba granos blancos y amarillos revueltos; si era adeco, apartaba y botaba los granos amarillos y si era de URD, hacía lo contrario; hasta en eso se era orgulloso. Había un señor que santiguaba a quien llamaban “Yito” Noriega; vestía siempre con un raído palto de Casimir marrón y un pantalón negro de la misma tela; no faltaba en su vestimenta el sombrero gris; caminaba muy pausado; le gustaba jugar dominó teniendo como compañero, a veces, al peluquero David, quien no solamente se dormía jugando, sino hasta cortando pelo, por lo que muchos clientes salían trasquilados de su barbería, o a Justo Marín, el dentista empírico o sacamuelas, empedernido jugador y preparador de gallos de pelea. Yito era tan furibundo adeco que cuando santiguaba, entre las oraciones que decía, repetía por lo bajito “¡que gane la blanca y pierda la amarilla!”, refiriéndose a las tarjetas que identificaban a estos dos partidos: URD la amarilla; blanca la de AD.
En una ocasión, las paredes de las principales calles de Porlamar amanecieron llenas con las letras URD amarillas en un fondo marrón; Ramón “Papelón” Rodríguez era muy amigo del señor Ramón Díaz; este vivía en la calle Libertad cerca de la calle La Marina; además de ejercer un cargo en la renta de licores, tenía una bodega donde vendían de todo, hasta artículos de ferretería y para pescadores; era un hombre muy correcto y de carácter fuerte; también se decía que era seguidor del General Marcos Pérez Jiménez, dictador que mandaba para la época. Ramón “Papelón” al ver las paredes con las letras URD se fue apuradito como siempre andaba él hasta la bodega de Ramón Díaz; lo llamó aparte y le dijo:
_ ¡Ramón, tienes que irte de aquí! ¡Te están buscando!
_ ¿Y a mí por qué tocayo? Pregunta Ramón Díaz.
_ ¡Mira! ¿Tú ves esas letras que están ahí? Le pregunta Ramón, ¡Fíjate! URD ¿Y sabes lo qué es eso?
_ ¿Qué es? Pregunta Ramón Díaz extrañado.
¡¿Tú no entiendes mijito?! Uye Ramón Díaz?! Le gritaba Ramón “Papelón”
…” ¡Viva Jóvito, nojoda!”
Pin “trompa ‘e hierro”
Tomado del libro: “Ocurrencias de mi gente” de Carlos Mujica “Marunga“
Foto: Referencia
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